Programa de Prevención de la Deserción Escolar. Pudahuel “Mi escuela, Mi barrio”

El objetivo de este proyecto es desarrollar una intervención integral con niños/as de sectores de alta vulnerabilidad social que disminuya los factores de riesgo asociados a la deserción escolar, a la vez que potencie los factores protectores a nivel individual, familiar y comunitario que favorezcan su mantención en el sistema escolar formal.

La intervención que se propone parte del supuesto que estableciendo dinámicas de cooperación y participación real, se logra un incremento en la capacidad promocional y preventiva de la deserción en la comunidad escolar. En este sentido, nos interesa involucrar a los diversos actores de las escuelas y de la comunidad a la que ésta pertenece (directivos, profesores, alumnos, padres y apoderados, dirigentes sociales) en una dinámica democrática de gestión de un programa de prevención psicosocial de la deserción escolar. Un insumo esencial para la intervención propuesta será el diagnóstico participativo que se emprenda en la comunidad a fin de detectar: los factores protectores y de riesgo, los actores importantes para el desarrollo del programa (líderes formales e informales, agrupaciones), necesidades y problemáticas subyacentes.

La prevención de tipo institucional se singularizaría por el abordaje de las problemáticas que afectan a la comunidad educativa como entidad foco de atención. De esta forma la intervención no se circunscribiría sólo a los individuos que manifiestan ciertas factores de riesgo, como es el consumo de drogas, la violencia, la sexualidad precoz; sino que se pasa el foco del sujeto a la institución, y es a ésta a la que hay que diagnosticar y sobre la que hay que intervenir. Desde esta perspectiva, la existencia de factores de riesgo entre los miembros de una comunidad educativa es considerado sintomático respecto al funcionamiento institucional/social/cultural de dicha comunidad.

Al considerar a la comunidad educativa y la institución en general como sujeto estratégico de la intervención, se posibilita la participación de todos los estamentos actores y de actores comunitarios relevantes en la definición de los factores que el mismo liceo puede manejar frente a las problemáticas psicosociales. Se hace referencia entonces, a que el mismo establecimiento educacional sea capaz de intervenir sobre las variables que como institución ayudan a la mantención y amplificación de estos problemas de orden psicosocial.

Se pretende, a través de esta visión, que la institución y la comunidad que lo rodea estén a cargo de problemáticas que resultan coherentes de abordar desde el contexto educativo y comunitario, haciéndose cargo del quehacer del establecimiento en torno a la existencia de problemáticas psicosociales, a través de un trabajo que, entre otras cosas, producirá una estrategia institucional de abordaje del tema y un plan de acción comunitario; de esta forma se posibilitará la reflexión y la intervención sobre dinámicas y factores que favorecen la deserción escolar.